Para la pequeña Ada En la era victoriana, cúspide del gran Imperio Británico, el advenimiento de la Revolución Industrial provocó un seísmo de tales dimensiones en el organigrama social que propició que confluyeran en el mismo salón de baile las artes y las ciencias, eso sí, sin ensuciarse de hollín ni el tafetán, ni elSigue leyendo «Ada Lovelace tenía swag»